Diseño Elástico

          En ocasiones se ve al edificio como un objeto fijo diseñado para estar anclado en el terreno, sin embargo olvidamos el gran potencial que es capaz de generar un espacio dispuesto a variar a causa del capricho de la circunstancia.

         De repente el edificio trabaja como la vida misma, y hasta se podría personificar el asunto si lo tratáramos como a un humano más. El hombre, en la vida, está sujeto a atravesar por sinnúmero de circunstancias las cuales directa o indirectamente lo afectan de forma positiva o negativa, no obstante son estas circunstancias las que le dan el carácter al hombre; son ese clímax en su vida donde se marca una línea entre el antes y el después del suceso. Esto es lo que debería capturar el espacio físico de un edificio; creando momentos trascendentales.  Si entramos más en detalles  nos preguntaríamos, ¿qué hace especial a la circunstancia: lo que se esperaba que va a pasar o lo aun desconocido: el misterio que envuelve la vida donde lo inesperado es capaz de asumir total control del momento?

         C. Pérez explica luego de haber expuesto sus puntos sobre la planificación análoga y digital del proyecto GET (Competencia de Galería de Espacio Temporal) en el Museo Nacional del Instituto de Cultura Puertorriqueña, que “entre perfil y perfil ocurrían errores” errores que fueron causados por falta de información, pero que generaron mayor información en el momento. Lo mas importante era el echo de que la estructura fuera capaz de comportarse según su propia inteligencia y que de forma consecuente reaccionara a las circunstancias (climáticas, constructivas, etc.). “Mediante el modelo paramétrico y generativo no diseñamos formas, sino que se programan condiciones para que las formas se generen” y este el camino que considero, le abre la puerta a estas nuevas propuestas arquitectónicas; donde momentos espontáneos  simplemente ocurran porque sí, sin razón de evitarlos, esforzarlos o imponerlos.

Texto: (in) forma 5: Narrativas Digitales

Argumento: Diseño Elástico

Autor: Carlos Pérez

Págs: 164-171